Sorprende a tus seres queridos con esta receta simple y deliciosa de mantequilla casera que requiere solo dos ingredientes: crema de leche y una pizca de sal. En pocos minutos, podrás disfrutar de una mantequilla fresca, cremosa y libre de aditivos, perfecta para untar tu pan tostado favorito, realzar tus salsas o agregar un toque gourmet a tus postres.
Ingredientes:
- 500 ml de crema de leche entera (35% de materia grasa), bien fría
- Una pizca de sal (opcional)
Utensilios:
- Batidora eléctrica o licuadora
- Recipiente hondo
- Colador de malla fina
- Espátula
- Envase hermético
Preparación:
- Batir la crema: Coloca la crema de leche fría en un recipiente hondo y comienza a batirla con batidoras eléctricas a velocidad media-alta. Observa cómo la crema va espesando y cambiando de textura.
- Separar la mantequilla: Continúa batiendo hasta que la crema se separe en dos partes: suero de leche (líquido) y la masa sólida de mantequilla. Este proceso puede tomar entre 5 y 10 minutos, dependiendo de la potencia de tu batidora y la temperatura de la crema.
- Recolectar la mantequilla: Cuando la mezcla se haya separado completamente, apaga la batidora y vierte el contenido del recipiente en un colador de malla fina colocado sobre un bol. Mueve la mantequilla con la espátula para eliminar el exceso de suero, presionando suavemente para que escurra todo el líquido.
- Lavar la mantequilla (opcional): Para obtener una mantequilla con un sabor más limpio y una textura más firme, puedes lavarla con agua fría. Coloca la mantequilla en un colador bajo un chorro de agua fría, presionando suavemente con la espátula para eliminar cualquier resto de suero.
- Amasar y dar forma: Transfiere la mantequilla lavada a un tazón y amásala brevemente con la espátula para unirla bien. Puedes agregar una pizca de sal en este paso, si lo deseas. Dale forma de bloque a la mantequilla y envuélvela en papel pergamino o plástico para alimentos.
- Refrigerar: Refrigera la mantequilla casera durante al menos 30 minutos antes de usarla. Esto permitirá que se solidifique y tenga una consistencia ideal para untar.
Consejos:
- Asegúrate de que la crema de leche esté bien fría antes de batirla. Esto ayudará a que la mantequilla se separe más fácilmente.
- Puedes usar crema de leche pasteurizada o cruda, sin embargo, la crema cruda puede tener un sabor más fuerte.
- Si no tienes batidora eléctrica, puedes batir la crema a mano con un batidor de alambre, pero tardará más tiempo.
- Puedes saborizar tu mantequilla casera agregando hierbas frescas picadas, ajo en polvo, ralladura de cítricos o incluso un toque de miel.
- La mantequilla casera se conserva en la nevera durante aproximadamente una semana. También puedes congelarla para usarla más adelante.
Disfruta de tu deliciosa mantequilla casera
Con esta sencilla receta, podrás preparar mantequilla fresca y de alta calidad en casa whenever you want. ¡Experimenta con diferentes sabores y sorprende a tu paladar con la frescura y calidad de la mantequilla casera!tunesharemore_vert
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